El Parlamento Europeo y el Consejo de la UE acordaron este lunes dar una nueva vuelta de tuerca en su lucha contra el plástico. Ambos organismos comunitarios han pactado un Reglamento sobre Envases y Residuos de Envases que da un paso más hacia el control de esta fuente de contaminación y alcanza incluso a los temidos PFAS, los ‘químicos eternos’, es decir, sustancias tóxicas presentes también en este material y que son una amenaza para la salud.
Estas son algunas de las claves de este nuevo reglamento:
‘Químicos eternos’: Los PFAS (sustancias perfluoradas de las que hay centenares de variedades diferentes en productos cotidianos) estarán prohibidos cuando se hallen en envases que estén en contacto con alimentos. Se pretende así reducir el riesgo que entrañan muchos de estos PFAS, a los que se atribuyen vínculos con numerosas enfermedades, incluso en proporciones muy bajas. “Es una gran victoria para la salud de los consumidores europeos”, dijo la negociadora principal de la Eurocámara, la liberal belga Frédérique Ries.
Menos embalajes: La nueva norma obligará a que los establecimientos de comida rápida, por ejemplo, permitan a los consumidores llevar su propio envase o recipiente para los alimentos o bebidas sin coste adicional. A partir de 2030, deberán también ofrecer al menos el 10% de sus productos en formatos de empaquetado reutilizables. Del mismo modo, productores e importadores deberán reducir al mínimo el tamaño de los paquetes, en los que el espacio vacío máximo será del 50%, y ello con el objetivo de terminar con la actual situación, en que a menudo gran parte del paquete está vacío, con los consiguientes impactos que ello genera.
Menos plástico en frutas y verduras: A partir del 1 de enero de 2030, si finalmente sale adelante el texto tal y como ha sido pactado, se prohibirán determinados envoltorios plásticos de un solo uso actualmente utilizados para envolver frutas y verduras frescas sin procesar.
Adiós a los minichampús de hotel y monodosis de cafetería: Los sobrecitos individuales (monodosis) de kétchup, mahonesa, azúcar o condimentos varios que suelen servirse en restaurantes o cafeterías no podrán ser de plástico a partir de dicha fecha. Del mismo modo, quedarán prohibidos los envases en miniatura para productos de tocador en hoteles y cualquier tipo de negocio (minichampús, por ejemplo) cuando sean de plástico.
Fin de los envoltorios para maletas en el aeropuerto: Otra de las novedades que incorporará el citado reglamento es la prohibición de utilizar celofán o plástico para envolver las maletas en el aeropuerto como medida de seguridad, por lo que deberán utilizarse otros sistemas alternativos.
Objetivos de reducción de envases: El acuerdo establece objetivos de reducción de envases (5% para 2030, 10% para 2035 y 15% para 2040) y exige a los países de la UE que reduzcan, en particular, la cantidad de residuos de envases de plástico. A finales de 2022 todos los envases deberán ser reciclables. Además, el 90% de los envases de hasta 3 litros de bebidas de plástico y metal de un solo uso deberán ser recogidos por separado a partir de 2029.
El acuerdo sobre el Reglamento sobre envases y residuos de envases, que antes de entrar en vigor tiene que ser adoptado formalmente por las dos instituciones, considera el ciclo de vida completo del embalaje.
Cada europeo genera en la actualidad casi 190 kilos de residuos de envases cada año y se espera que esta cifra aumente a 209 kilos en 2030 sin medidas adicionales.
………………….
Contacto de la sección de Medio Ambiente: [email protected]